Los “halcones” de la Fed ponen en duda las esperanzas de una política más flexible
El USD se mantiene firme ante mercados monetarios ajustados y la incertidumbre de la política de la Fed El dólar estadounidense sigue atrayendo demanda, mientras los mercados reevalúan la probabilidad de un recorte de tasas de la Reserva Federal al rango de 3,00–3,25 % en diciembre. Además, el billete verde recibe apoyo adicional de las condiciones más restrictivas en los mercados monetarios, impulsadas por los esfuerzos del Departamento del Tesoro para reconstruir sus reservas de efectivo. Con pocos datos oficiales previstos esta semana, la atención de los inversores se centra en los informes laborales del sector privado, que ofrecerán una lectura sobre la salud del mercado laboral estadounidense.
Dos factores principales sostienen la resiliencia del dólar:
Tras la conferencia de prensa del presidente de la Reserva Federal la semana pasada, la probabilidad de un recorte de tasas de 25 puntos básicos en diciembre cayó al 66 %, y podría disminuir aún más según los próximos datos laborales. El Índice ISM Manufacturero, publicado hoy, incluye un componente de empleo, mientras que el reporte de empleo ADP del miércoles será probablemente el dato más influyente de la semana. Las divergencias entre los miembros de la Fed han incrementado la incertidumbre: el viernes, dos nuevos miembros entrantes del FOMC declararon que habrían votado en contra del recorte de tasas si hubieran tenido derecho a voto.
La reducción cuantitativa (QT) de la Fed ha disminuido las reservas bancarias, mientras que el Tesoro ha incrementado su cuenta general de 300.000 millones a 950.000 millones de dólares. Este cambio de exceso de liquidez a condiciones más ajustadas se reflejó en los datos del viernes, que mostraron que los bancos pidieron prestados 50.000 millones de dólares durante la noche al 4,00 %, por encima del punto medio del rango objetivo de la Fed (3,75–4,00 %). Tales condiciones suelen respaldar al dólar y pueden extenderse globalmente a través de swaps de divisas cruzadas, especialmente si los bancos comienzan a cambiar euros por financiación en dólares. Esto podría ejercer presión bajista sobre el EUR/USD, aunque por ahora no hay señales de tensión en el mercado.
La volatilidad del EUR/USD ha caído por debajo del 6 %, acercándose a los mínimos del verano de 2024 (5,30 %). El riesgo reversible a tres meses también se ha aplanado, indicando una menor confianza alcista en el euro. El consenso del mercado sitúa el EUR/USD en 1,18 para finales de año, aunque los analistas de ING ven posible una ligera recuperación si la Fed adopta un tono más “dovish”. Sin embargo, se espera que los comentarios del Banco Central Europeo esta semana no brinden un apoyo significativo. El debate dentro de la eurozona se centra en la baja inflación y la posibilidad de nuevos recortes de tasas.
Los analistas esperan que el EUR/USD encuentre soporte cerca de 1,1500, especialmente si los datos laborales estadounidenses son más débiles.
Los mercados han comenzado a valorar una posible reducción de tasas del Banco de Inglaterra ya este jueves. La probabilidad, que a inicios de octubre era del 6 %, ha subido al 29 %. Algunas grandes firmas de inversión han ajustado sus pronósticos y ahora anticipan un movimiento esta semana. El economista de ING en el Reino Unido considera que el banco central podría esperar hasta la presentación del Presupuesto de Otoño antes de actuar. Dado que la tasa terminal ya está valorada en 3,25 % para el próximo verano, el margen bajista de la libra podría ser limitado. El par EUR/GBP podría caer ligeramente si el banco mantiene su tono “halcón”, con interés comprador cerca del rango 0,8730–0,8750.
Polonia: El banco central podría reducir la tasa en 25 puntos básicos hasta el 4,25 %, tras una inesperada caída de la inflación. Chequia: Se espera que el Banco Nacional Checo mantenga la tasa en 3,50 %, con atención en sus nuevas previsiones económicas. Hungría: Publicará indicadores clave más adelante esta semana.
En el plano político, el nuevo gobierno checo firmará hoy un acuerdo de coalición que, según filtraciones, incluirá medidas antiinflacionarias de corto plazo y un déficit fiscal estable. El viernes, el primer ministro húngaro Viktor Orbán se reunirá con el presidente de Estados Unidos en Budapest para discutir importaciones energéticas y cooperación estratégica.